¡Objetivo cumplido! Después de varios intentos al final se ve la luz al final del túnel, :-) El que la sigue, la consigue.
Ya me he puesto manos a la obra para aplicar lo aprendido en un trabajo real. Mientras trabajo en ello, os adelanto los pasos que me han dado resultado.
Debido a que el soporte, madera, era bastante poroso he optado por dar en primer lugar una mano de Gesso (en mi caso Acrylic Paint Gesso de la casa Delta Ceramcoat).
2º paso. He pintado el color de fondo.
3º paso. Barniz craquelador. El fabricante recomienda esperar de 20 a 40 minutos. Le he dado un poco más de margen, esperando una hora. He aplicado de forma abundante el craquelado de un componente, aunque no lo suficiente porque el craquelado es aún poco pequeño. Importante, quedará mejor si se da en una única dirección.
4º paso. He pintado la capa final de pintura (la que dejará ver el efecto del craquelado). He probado con pincel y con esponja, definitivamente esta segunda opción es la más aconsejable ya que comparativamente se obtiene un craquelado mayor (en tamaño y extensión) que con el pincel.
5º paso. He acelerado el proceso aplicando una fuente de calor, en este caso con el secador de pelo.
Y bueno, así he conseguido ponerme en la buena senda del craquelado. Ahora toca seguir practicando.
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